El Parque Ecológico El Puma de Candelaria, que depende del Ministerio de Ecología y Recursos Naturales Renovables, continúa en proceso de revalorización de sus áreas destinadas a la recuperación de los animales silvestres. Por esa razón, desde la pandemia del coronavirus no recibe la visita del público. Puertas adentro, no obstante, el centro de rehabilitación de fauna nativa de 25 hectáreas, ubicado en cercanías del río Paraná, sigue funcionando con normalidad.
Hasta el momento han sido numerosas las consultas sobre la reapertura de la reserva natural para las visitas. Se estima que este año los visitantes volverían a ser recibidos en el predio. Los trabajos de mejora en la infraestructura se centran puntualmente en el espacio de atención para los ejemplares que llegan afectados por haber sido atropellados por vehículos, por haber sido sometidos al mascotismo o por otras situaciones, como ataques de seres humanos o perros.
El plantel del Puma trabaja en articulación con las demás dependencias de Ecología (Fauna, Biodiversidad, Áreas Naturales Protegidas, Educación Ambiental) e instituciones como Güirá Oga de Puerto Iguazú, Fundación Temaikén, Centro Ohana, universidades nacionales, municipios y fuerzas de seguridad (provincial y nacionales).
Vale destacar que el Puma es un centro de rehabilitación de animales silvestres. Hay casos en los que este proceso se da con mayor rapidez. Sin embargo, los profesionales se han encontrado con situaciones en las que su recuperación puede llevar meses y hasta años, porque al ejemplar le cuesta volver a ser un animal silvestre: debe reaprender a comer solo, a cazar, a esconderse, a buscar refugio y a convivir con sus pares. Hay animales que, por lesiones severas que presentan o sus secuelas o porque no vuelven a retomar sus hábitos originales, quedan alojados en el predio como residentes permanentes.
Fuente: Ministerio de Ecología